jueves, 27 de octubre de 2016

Soy una intensa.

Soy una intensa. No me gustan las cosas a medias, y aunque a veces me quedo en fase menguante siempre acabo sabiendo como llenarme. No quiero prisas, pero mis córneas son prismas que saben como tergiversarme por el camino. Y es entonces cuando lo que rompo no vuelve a ser lo mismo.

Circunferencias con fin.

Se me da de pena cerrar heridas, pero tan solo las mías.
Dibujo circunferencias parecidas a las tuyas,
con las que de vez en cuando me miras, pero con las que no me sueles ver.
Trece.
Son el número de veces, que, sin éxito, te llamé, y me hiciste perder.
Es Martes, y aunque siento tanto como antes, este es nuestro desenlace.
No tienes más espalda para mis letras, ni yo ganas de tus tretas.
Indispuestas a volver a dejarme entrever lo que la vida me ha negado una y otra vez.